Mañana (N.E. 1 febrero 2022), el Congreso reinicia sus sesiones ordinarias y, como se sabe, la atención está centrada en la fem, en una eventual reforma electoral y en la adscripción de la Guardia Nacional a la Sedena. Sin embargo, no hay que olvidar que ésta es la segunda Legislatura de la paridad y está llamada a seguir avanzando en la agenda de igualdad entre mujeres y hombres, destacadamente, en el derecho de las mujeres y las niñas a vivir una vida libre de violencias y en la prevención y sanción del feminicidio.
La legislatura anterior reformó las leyes que hicieron posible la llamada paridad total por la cual hoy no sólo en el Poder Legislativo hay una inédita presencia de mujeres, sino también en el Poder Judicial y en las gubernaturas: nunca en la historia de México habíamos tenido ocho mujeres gobernadoras al frente de sus estados.
Ciertamente, el sólo hecho de que haya mujeres ocupando cargos de decisión no garantiza que éstas tengan conciencia de género y actúen desde sus posiciones para mejorar la vida de las demás, por eso es necesario recordar y exigir permanentemente a quienes hoy son autoridad que en un país donde de los sesenta millones de pobres, las mujeres llevan la peor parte; donde sigue existiendo brecha salarial en razón de género; donde desde el poder se protege y premia a los acosadores; donde millones sufren todos los días violencias y muerte; y donde, en vez de igualdad, en las mujeres recae la mayor parte de los cuidados en las familias, están obligadas a trabajar para eliminar todo lo que a las mexicanas nos lastima y nos relega.
La LXIV Legislatura dejó un legado muy importante para las mujeres de este país al aprobar iniciativas de reformas constitucionales y legales para reconocer y sancionar las diversas violencias que se cometen contra las niñas y mujeres, incluyendo la violencia política; y estableció medidas para disminuir las brechas de desigualdad que padece la mitad de la población, como la desigualdad salarial, las licencias parentales, así como el reconocimiento del Derecho al Cuidado Digno y Tiempo Propio y la creación del Sistema Nacional de Cuidados. Además, se aprobó una reforma referente al feminicidio homologado para lograr un tipo penal único en todo el país
Varias de estas iniciativas están congeladas en el Senado de la República, por lo que el colectivo Rebeldes con Causa, conformado por exlegisladoras y políticas de importante trayectoria, como Verónica Juárez, Martha Tagle, Lorena Villavicencio y yo, hacemos un respetuoso llamado a dar continuidad al proceso legislativo iniciado por la Cámara de Diputados, en donde también hay iniciativas muy relevantes como la que reforma el Código Penal Federal y La ley General de Acceso de las Mujeres a una vida Libre de Violencia para eliminar la prescripción para presentar denuncias contra delitos que atentan contra la integridad y vida de las niñas y mujeres.
También solicitamos la aprobación de la iniciativa conocida 3 de 3 contra las violencias que evitaría que acosadores sexuales, violadores y deudores de pensión alimenticia ocupen cargos públicos, igual que la reforma a la Ley General de Salud y a la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia para identificar, prevenir y erradicar la violencia obstétrica contra las mujeres, asegurando trato digno y el derecho al parto humanizado, así como para incorporar unidades de partería en las instituciones de salud.
Otras iniciativas que nos parecen sustantivas para ampliar el principio de paridad al ámbito privado es aprobar la reforma a la Ley de Asociaciones Mercantiles y tres leyes más, a fin de garantizar la integración paritaria de las mujeres en los consejos de administración de las empresas, así como en los consejos editoriales en los medios de comunicación.
En las legislaturas, como en la vida, hay cosas urgentes y cosas importantes, hoy pedimos a las y los legisladores no dejar de atender las cosas que importan a millones de mujeres y niñas.
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