¡Órale, compadres! Aquí en DeVotos y otros políticos Nonsanctos, donde el voto libre se confunde con el «voto por un pinche programa social», les traigo el chisme fresco del circo electoral. Imagínense: Claudio X. González, el rey de los fifís con más lana que escrúpulos, y sus compadres de la Marea Rosa –esa que pintó las calles de rosa en 2023 pa’ defender al INE como si fuera su club de golf– acaban de lanzar «Salvemos la Democracia». Sí, leyeron bien: una iniciativa ciudadana que huele a naftalina neoliberal, presentada el 8 de octubre en el Hilton, como si el lujo no contradijera su discurso de «pueblo unido».
La movida es clarita: juntar 130 mil firmas en dos meses vía la app del INE (¡descárguenla en salvemoslademocracia.mx, no vaya a ser que se pierdan el like patriótico!). Quieren reformar artículos 41, 54, 63, 116 y 134 de la Constitución pa’ blindar al INE, sacar al narco y huachicoleros de las urnas (¡ja! Como si Morena no tuviera sus propios diablitos), prohibir que usen programas sociales pa’ comprar votos –ups, ¿clientelismo?– y evitar sobrerrepresentación de coaliciones. O sea, cancha pareja, árbitro imparcial y cero chapulineo. Presentan en febrero 2026, pa’ que el Congreso –léase: la mayoría morenista– la debata junto con la de Sheinbaum. ¿Suena noble? Claro, si no fuera por el pedigree.
Claudio X., lideran esto y ya sabemos el rechazo que él genera en la 4T. Ana Lucía Medina de SocCivilMX lo dijo clarito: «Es pa’ frenar el Plan C autoritario». Y líderes juveniles como Guillermo Ruiz posan de salvadores, gritando «¡La democracia no se sostiene sola!». Pero, ¿quién se traga eso? En redes y columnas como El Universal o Reforma, ya lo pintan de rechazada: Morena, con su «barredora legislativa», la va a usar pa’ limpiarse el trasero. Pablo Gómez, de la Comisión Electoral, la dio la bienvenida con sorna: «Legítima, pero independiente de la nuestra». Traducción: «Gracias, pero no gracias, fifís».
Es sátira pura: los que perdieron la elección con su «Sí por México» ahora quieren «salvarnos» de la 4T, mientras Sheinbaum arma su reforma pa’ eficientar el voto –que pa’ ellos es sinónimo de «robo»–. ¿Rechazo? Masivo, carnales. Morena ya tuitea que es «contrapropuesta de los de siempre», tratando de presentar a Claudio como el villano de telenovela: el que llora por democracia, pero financia campañas opositoras. ¿Karma? Si juntan firmas, bravo; si no, será otro grito en el desierto rosado. Al final, la democracia se salva votando con cabeza, no con hashtags. ¿O nomás con el huachicol que ellos mismos denuncian?
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