El objetivo es que el nivel de vida de todos mejore con las nuevas tecnologías.
La Organización de las Naciones Unidas designó, desde 2005, el 17 de mayo como el Día Mundial de la Sociedad de la Información, mejor conocido como el Día de Internet. México y varios países del mundo se adhirieron a la celebración de la efeméride bajo la premisa de que el internet debe ser considerado un recurso mundial accesible a todos.
El objetivo principal es que el nivel de vida de todos los pueblos, fundamentalmente de los no conectados, acceda y mejore con las nuevas tecnologías. Es indiscutible que la llamada carretera de la información es el camino más corto para buscar reducir las desigualdades socioeconómicas, impulsar el desarrollo y fortalecer la transparencia de los gobiernos, pero, sobre todo, en materia educativa para poner el piso parejo para todos los niños y jóvenes en la competencia de mejores oportunidades.
Los reportes del Banco Mundial reconocen que durante los gobiernos del PAN, entre 2000 y 2012, se dieron pasos fundamentales para reducir la brecha digital que enfrentaba el país. Las decisiones de política pública permitieron que pasáramos de 5.1 personas de cada 100 a 46.5 personas conectadas a internet.
De acuerdo con los más recientes indicadores, la tarea está inacabada y aún estamos lejos de podernos presumir como una sociedad conectada; sólo en la región de Latinoamérica, México se encuentra por debajo de Chile y de Brasil.
El camino es largo y se requiere de un esfuerzo conjunto y sostenido de sociedad, gobierno, las Cámaras de diputados locales y federal y, por supuesto, de la iniciativa privada.
Aunque la Asociación Mexicana de Internet (AMIPCI) revela que actualmente cerca de 47 millones de mexicanos están conectados, la cifra no refleja la verdadera posición de México en materia de conectividad. El internet en México es caro, lento e inaccesible aun para muchos mexicanos.
La velocidad de conexión a redes fijas es 10 veces más lenta comparativamente con otros países y mucho más cara, puede llegar a costar hasta 10 veces más, y la velocidad de conexión de 13.07 mega bits por segundo, un promedio que pudiera parecer hasta insignificante frente a los 120.99 Mbps de ciudades como Singapur.
Los legisladores panistas, en congruencia con la transformación iniciada en el año 2000, seguimos impulsando que a través de leyes que se adaptan a las nuevas necesidades, los ciudadanos cuenten con las mejores oportunidades. Como ninguna otra ciudad del país, la de México, ahora por ley, deberá ofrecer acceso a internet vía Wi-Fi de manera gradual, hasta lograr la totalidad de conectividad en las plazas y el transporte.
La nueva Ley de Internet para Todos es posible gracias al apoyo de las otras fuerzas políticas y del propio jefe de Gobierno, quien, a través de la Secretaría de Ciencia y Tecnología, deberá proveer los recursos necesarios para el buen cumplimiento de la legislación.
La accesibilidad será tan igualitaria como libre para todos los capitalinos, podrán descargar todos los contenidos y navegar en las redes sociales, mismas a las que nueve de cada diez internautas están inscritos. La recién aprobada ley es una buena manera de festejar el Día Mundial de Internet, al mismo tiempo que abre la oportunidad para reflexionar sobre la veracidad de la información que consumimos y el nivel de debate e intercambio de ideas deseable en la red.
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