En el año 2000, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) acordó, después de muchos desencuentros entre los países miembros, lo que se llamó Los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) 2015, con objetivos muy claros y concretos que iban, desde erradicar la pobreza extrema y el hambre, hasta la lucha contra el paludismo y el VIH-SIDA, así como proteger y mejorar el medio ambiente, reducir la mortalidad infantil y materna, lograr la enseñanza primaria universal, lograr la igualdad de género y crear una alianza mundial para estimular el desarrollo y se establecieron indicadores de seguimiento bajo la supervisión del Banco Mundial y otros organismos internacionales.
De acuerdo con los Objetivos de Desarrollo del Milenio. México logró reducir la pobreza extrema que bajó de un 9.3% a un 3.7%, prácticamente logró la cobertura universal en educación primaria y disminuyó la tasa de mortalidad infantil de 32.5 a 13 por cada mil niños nacidos y se lograron avances significativos en acceso al agua potable. No se logró reducir las emisiones de dióxido de carbono ni la proporción de viviendas que usan leña o carbón para cocinar y en cuestiones de salud, poco se redujo la tasa de mortalidad por VIH-SIDA y la incidencia en tuberculosis pulmonar.
En septiembre del presente año se llevó a cabo la Asamblea General de la ONU, en la que los 193 Estados acordaron por unanimidad la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible en la que fue notable la presencia y actuación de organizaciones de la sociedad civil y líderes e investigadores privados, que aportaron ideas diferentes a las de los representantes de los gobiernos de los países. Esta Agenda contiene 17 objetivos que serán la base para los programas globales de desarrollo para los siguientes quince años. Además, cada uno de los objetivos tiene sus propias metas, totalizando 169 retos para el mundo y para cada uno de los países firmantes.
Sin embargo, se calcula que para alcanzar estos objetivos a nivel global se requerirán 2.5 billones de dólares, en circunstancias en las que la economía global tiene en 2015 un mal año, con apenas 3% de crecimiento del PIB y según el Fondo Monetario Internacional, el año 2016 será más bajo.. América Latina tendrá un mal desempeño con un crecimiento de sólo 1% en 2015 y 0.8% para 2016, pues países como Brasil y Venezuela están en un periodo de recesión y los países del llamado “primer mundo” no han podido levantar cabeza desde la crisis del 2008, con excepción de Estados Unidos; Europa, que con Grecia, España y Rusia en recesión tiene serios problemas, además, el motor de la economía mundial, China, ha disminuido seriamente su actividad económica y tiene crisis empresarial en su bolsa de valores, lo que ha obligado al Gobierno Chino a inyectarle miles de millones de dólares. Esta disminución en la economía global hace más difícil el cumplimiento de los objetivos de la Agenda; México no es la excepción, pues en los últimos tres años ha presentado raquíticos crecimientos en su economía y según el Banco Mundial, una de cada 3 personas en pobreza extrema en América Latina es mexicana, es decir, toda América Latina tiene 33.8 millones de personas en pobreza extrema, de las cuales 11.4 millones son mexicanos.
Entre los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) se encuentra en primer lugar acabar con la pobreza en todas sus formas, lo cual es un reto monumental para México y para el mundo. El segundo objetivo es acabar con el hambre y mejorar la nutrición, para lo cual se requiere promover la agricultura sostenible; se incluye también asegurar una vida sana y promover el bienestar de la población.
En el aspecto educativo, se establece que se debe garantizar una educación de calidad y equitativa y otorgar oportunidades de aprender a todas las personas; igualmente se debe buscar la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres.
En materia ambiental, se fijan cuatro objetivos:
- Asegurar la disponibilidad y la gestión sostenible del agua y el saneamiento.
- Tomar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus impactos.
- Conservar y utilizar de manera sostenible los océanos, los mares y los recursos marinos.
- Proteger, restaurar y promover el uso sostenible de los ecosistemas y el manejo sostenible de los bosques.
En relación con la Economía, se instituye promover el crecimiento sostenido, el empleo pleno y productivo. Construir infraestructura flexible, promover la industrialización y la innovación; lograr que las ciudades y asentamientos humanos sean seguros y sostenibles, así como promover sociedades pacíficas, facilitar el acceso a la justicia, construir instituciones, e implementar la alianza mundial para el desarrollo sostenible.
Como se puede apreciar, los compromisos son muy altos para tan solo quince años, pero todo lo que se logre sería un buen avance ante el deterioro social y económico que México y el mundo están sufriendo.
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