*Complejidad Para Integrar el Paquete Económico
*No hay Recurso que Alcance vía Mantener el Gasto
*Urgente Atemperar los Efectos de la Tempestad
Es quizás esta ocasión una de las más complejas que se haya presentado para integrar y aprobar el paquete económico, que se encuentra, por ser Cámara de origen bajo la responsabilidad de los diputados. Los factores actuales hacen poco propicio un ejercicio con indicadores alentadores para el próximo año, por el contrario, las dificultades económicas son previsibles. En esa virtud, los legisladores están obligados a contemplar medidas encaminadas a paliar el temporal.
Desde hace tiempo se hizo el planteamiento para evitar los sobreendeudamientos de los gobiernos locales, tanto estatales como municipales, lamentablemente sin arribar a buen puerto, ahora vemos su indiscriminado incremento, aunado a los consiguientes desórdenes administrativos y financieros, circunstancia que en buena medida les impide un adecuado proceso de planeación, menos aún, cumplir adecuadamente con su función, pues bajo las condiciones actuales no existe recurso que les alcance para satisfacer las necesidades sociales y mantener el nivel de gasto que tienen.
Por otra parte, se han servido con la cuchara grande en materia de salarios y compensaciones, eso sin tomar en cuenta lo que reciben por fuera que, finalmente también tiene su impacto en el costo de los contratos, pasándose por el arco del triunfo la regulación salarial.
La baja en el precio del petróleo, su plataforma de producción y el actual régimen fiscal, son barreras sin duda, que deberán observar los diputados, en tanto que limitan el presupuesto, así como por otra parte también se localizan el déficit, costo financiero de la deuda, la depreciación del peso frente al dólar y otros compromisos ineludibles que se deben considerar.
En tanto, por otro lado, estar conscientes que la paridad actual irá acarreando un proceso inflacionario y no se ven medidas de atemperamiento, requiere a la par de bajar el gasto superfluo -que existe y mucho-, una verdadera reingeniería administrativa en todos los órdenes de gobierno, evitar a toda costa el dispendio e introducir mecanismos para impulsar el consumo interno, aplicando políticas efectivas para reducir la corrupción.
Es insuficiente un paquete económico de aparente equilibrio, si no va acompañado de efectivos programas de austeridad, lo que permitirá mayor eficiencia en la orientación de los recursos disponibles, que sirvan para atender las necesidades del país y atemperar los efectos de la tempestad.
Estos tiempos se han registrado en la historia en otros momentos bajo condiciones similares, y vimos el desastre, espero no cometamos los mismo errores, simplemente recordar que de las experiencias pasadas también se aprende.
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