No sólo han sido las muertes y los enfermos, la pandemia por covid-19 trajo consigo otra crisis: la económica; exacerbada sobre todo en los países con gobiernos que fueron incapaces de hacer una gestión eficiente de la enfermedad, como el caso de México.
En particular, el Gobierno de la Ciudad de México quedó exhibido como lo que es: oportunista, mediocre e incapaz.
La jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, fue mostrada como una mandataria sobrepasada por un problema mundial que sólo vino a intensificar las fallas de su administración, la cual, incluso sin pandemia, ya se mostraba ineficiente.
En cada evento público, Sheinbaum se ha llenado la boca con discursos parcos y omisos sobre cómo su gobierno enfrentó el virus. Sin embargo, pese a la fantasía que narra desde su oficina, las cifras públicas y los hechos la ponen en evidencia como la mentirosa que es.
En 2020, la mayoría de Morena en el Congreso de la CDMX aprobó reformas a la Ley de Austeridad, Transparencia en Remuneraciones, Prestaciones y Ejercicio de recursos, para dar paso a la llamada #LeySheinbaum y, con ello permitirle a la jefa de Gobierno echar mano discrecionalmente al 10% del presupuesto de la ciudad cuando se presente una emergencia sanitaria o desastre natural.
Sin embargo, en el 2020 sólo se utilizaron 8,002 millones de pesos en hacer frente a la pandemia, es decir, el 3.44% del presupuesto; mientras que en el periodo de enero-septiembre de 2021, para combatir covid-19 y sus efectos económicos, apenas se han ejercido 2,850.3 millones de pesos, es decir, el 1.6% del gasto. La puerta abierta al gasto discrecional que se le dio a la jefa de Gobierno ni siquiera ha sido ejecutada de forma exitosa, exigió acceso a recursos y no tienen idea de cómo utilizarlos.
Pese a ello, en el 2020 la economía nacional se contrajo 8.3%, pero la de la CDMX incluso más al caer 9.5 por ciento. Es más, datos del Coneval demuestran que con la “4T” el número de mexicanos en situación de pobreza pasó de 51.9 millones a 55.7 millones en el país, mientras que en la CDMX el crecimiento fue de 163% de 2018 a 2020, pasando de 152,100 a 400,400 personas en pobreza extrema. Podemos afirmar desde ya que la #LeySheinbaum no sirvió ni para atajar la pandemia ni para reactivar la economía.
No obstante, ella ya ve la pandemia y todos sus efectos superados. Pinta a la ciudad en un semáforo verde forzado, cuando el exceso de mortalidad ronda el 75%, de acuerdo con cifras federales, pero la Secretaría de Salud local no actualiza su reporte de exceso de mortalidad desde agosto de 2020.
Apenas va a la mitad del camino y Sheinbaum ya perdió todo rumbo. Faltan tres años, pero ella ya tiene su mirada fija en el 2024, arrancando una campaña de promoción personal extremadamente anticipada y burda, entregando tarjetas y haciendo sus propias encuestas. Lo que pase de aquí a ese momento ya dejó de importarle.
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