Pese al discurso de que vamos “requetebién”, los números muestran la verdad en México, las familias tendrán un complicado cierre de año y arranque del siguiente, pues según el Banco de México se espera un mayor incremento en los precios.
El banco central estima que la inflación subirá hasta 6.8% al cierre de 2021, lo cual implica que el poder de compra de las familias disminuirá con precios más altos en muchos productos de la canasta básica durante las fiestas navideñas.
En octubre, el precio de los productos agropecuarios, pecuarios y energéticos acumularon las mayor alzas de precios, como el tomate verde que en un año ha subido 25.44%, la cebolla 19.33%, la electricidad 18.80% y el gas 8.20%.
La autoridad monetaria dejó ver que la alta inflación externa es un riesgo para el comportamiento de los precios locales, así como un aumento en los costos de producción, la depreciación cambiaria y el aumento en los precios energéticos y agropecuarios, que llevan meses subiendo.
La inflación es un fenómeno que se observa en la economía de un país y está relacionado con el aumento desordenado de los precios de la mayor parte de los bienes y servicios que se comercian en sus mercados, por un periodo de tiempo prolongado.
Cuando hay inflación en una economía, es muy difícil distribuir nuestros ingresos, planear un viaje, pagar nuestras deudas o invertir en algo rentable, ya que los precios, que eran una referencia para asignar nuestro dinero de la mejor manera posible, están distorsionados.
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