Mucho se ha dicho acerca de la imagen de los partidos, entendida como la percepción que el público tiene de los distintos institutos políticos que operan en el país, pero poco se ha dicho de la forma en que las propias fuerzas políticas cuidan este aspecto sobre todo a la luz de los escándalos que involucran a líderes y militantes. Una pista para entender esto la tenemos en la forma en que cada partido concibe la labor de comunicación social como parte de sus estructuras y, dentro de esto, el tema de la imagen institucional.
Imagen y comunicación
Para los partidos políticos, la labor de comunicación es algo complejo pero no porque sea así en sí misma, sino por la forma en que han complicado esta tarea.
Para comenzar, hay que describir la forma en que se lleva a cabo la labor de comunicación social en éstos pues se trata de una actividad con poca continuidad, alta rotación de personal, que en bastantes ocasiones es encargada a personas sin la formación adecuada, a lo que se suma falta de planes de capacitación para el personal o de reclutamiento para contar con alguien especializado en este tema.
Claro que existen, o han existido, algunas excepciones pero la generalidad apunta a esfuerzos dispersos, poco coordinados con las estructuras estatales y sin medición de resultados.
Es por esto, entre otras razones, que la imagen de los partidos lleva tiempo siendo negativa entre amplios sectores de la ciudadanía. Para la mayoría de los partidos, su imagen no es una prioridad como tampoco se concibe como un activo a resguardar y fortalecer.
Si pensamos que cada acción que realicen los militantes y dirigentes abona en un sentido negativo o positivo en la imagen de su institución, no se concibe que no se incluya este aspecto en los programas de comunicación interna o de formación, para que entre todos los miembros de la misma se cuide la imagen del mismo.
Y es que en tanto el partido es dejado a la deriva con poco trabajo en áreas como la comentada, contrasta la forma en que los aspirantes a una candidatura trabajan para cuidar su imagen, pues ahí sí hay coordinación, planes y capacitación para el equipo de trabajo.
Esto se explica, en parte, por la forma en que el ciudadano ha dejado de votar por partidos para volcar su apoyo a los candidatos lo que ha ocasionado que los órganos partidistas vivan lo que para muchos es un ocaso.
Pero también se explica por prácticas que en poco ayudan a mejorar la imagen de la marca, de las siglas mediante las cuales piden el voto a los electores.
Para adentrarnos en este aspecto, hay que considerar que uno de los detalles que ayuda a entender los problemas que derivan en una imagen cuestionada o poco positiva es el relativo a los voceros. En la mayoría de nuestros partidos, el presidente es a la vez el vocero por lo que las demás actividades del partido son minimizadas por lo que el dirigente del instituto político declare a la prensa.
Como ha sido la tendencia en el caso del PAN, Morena y el Partido Verde, el presidente de cada uno de estos institutos aparece frecuentemente en medios utilizando incluso las prerrogativas oficiales que para este particular el INE otorga, generando críticas pues se considera que esto conlleva más una promoción personal que una labor de comunicación social.
Asimismo, en conferencias de prensa es el líder nacional quien lleva la voz cantante, lo que genera que las respuestas a las preguntas de los reporteros sean presentadas como la posición institucional aunque los órganos deliberativos del partido no hayan fijado una postura, por lo que no es infrecuente que poco después otros militantes declaren en otro sentido, proyectando una imagen de desunión o descoordinación del partido.
Y, como mencionamos en párrafos anteriores, la medición de resultados con base en los planes o proyectos es casi nulo, pues no se fijan metas para las áreas de comunicación, mismas que cambian constantemente de personal y herramientas de difusión, pues en una administración se puede llegar a publicar una revista o un portal de Internet para cambiarlo todo a la siguiente.
En resumen, la imagen del partido es algo que no preocupa de sobremanera a los militantes, por lo que este tipo de tareas no reciben la atención que merecen con los resultados que todos podemos comentar. Además, la mala imagen de los partidos tampoco parece preocupar a sus miembros, como si competir con una marca desgastada fuera alguna ventaja.
Del tintero
Hoy, 8 de marzo, se celebra el día internacional de la mujer, una felicitación a todas ellas. Esperamos que las oportunidades sean parejas para todos y no se tenga que hablar de este tema en una fecha como esta.
También recordamos que en 2014 desapareció sin dejar rastro alguno el vuelo 370 de Malaysia Airlines, un Boeing 777 con 227 pasajeros y 12 miembros de tripulación a bordo. Durante varios meses de búsqueda, no se encontraron pistas para saber que sucedió con la aeronave, lo cual alimentó distintas teorías de la conspiración acerca del destino de la nave.
Twitter: @AReyesVigueras
There is no ads to display, Please add some