El plan de desarrollo y recuperación urbana más ambicioso de la administración del Gobierno del Distrito Federal.
La realización del proyecto del Corredor Cultural Chapultepec –Zona Rosa está en las manos de los habitantes de la delegación Cuauhtémoc.
Esa es la promesa que el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, ha hecho a los capitalinos en caso de que la consulta de hoy arroje un rechazo mayoritario al proyecto.
El plan de desarrollo y recuperación urbana más ambicioso de la administración del Gobierno del DF —mil millones de pesos en inversión privada en 116 mil metros cuadrados de extensión— está sujeto a la voluntad de los ciudadanos. Su voz será la determinante para definir el rumbo que tomará.
Opción de decisión y consulta que los capitalinos no tuvimos en gobiernos anteriores. No se dio cuando Andrés Manuel López Obrador hizo el segundo piso del Periférico; tampoco se dio con la Línea 12 de Marcelo Ebrard.
Hoy, pese a que la consulta, organizada por el Instituto de Electoral del DF, no cuenta con carácter vinculatorio, el jefe de Gobierno ha empeñado su palabra en que se va a respetar la postura de los ciudadanos.
Las cartas están puestas sobre la mesa, pero falta un jugador. Un jugador que ha sido polémico, mediático, protagonista, pero que hoy está en silencio. ¿A qué juega el jefe delegacional, Ricardo Monreal?
En un tema de tal relevancia, en donde todos los actores involucrados han manifestado sus posturas, hoy Monreal lanza desde lejos y fuera del debate un tímido “apoyo” al resultado de la consulta.
¿En dónde está aquel Monreal que se instaló en una mesa afuera del edificio delegacional recibiendo a vecinos y atendiendo sus quejas desde antes que tomara posesión? ¿Dónde está el Monreal que acusó de corrupción luego de recibir una bolsa con más de un millón de pesos de dudosa procedencia? ¿Dónde está quien acusaba amenazas de muerte en su contra?
¿Acaso será que espera a que se den los resultados de la consulta para radicalizarse nuevamente en caso de que gane el no? ¿O, probablemente, espera a que gane el sí para consolidar más su cercanía con la administración capitalina?
A diferencia de los legisladores locales de su partido –Movimiento Regeneración Nacional— quienes sí han manifestado abiertamente su rechazo al proyecto, Monreal ha sido muy cauteloso en declarar su postura, pues sabe que de ello depende su futuro político.
Lo que nos lleva a concluir que sus pensamientos y su mirada está más dirigida a la Plaza de la Constitución que en la avenida Chapultepec.
No cabe duda que un proyecto de tal magnitud, por su dimensión e implicaciones económicas, pueden destruir las aspiraciones de cualquiera. Por lo que no será de extrañarse que Monreal reaparezca en tanto estén listos los resultados de la consulta, del lado del grupo vencedor.
Una postura que bien le podría costar su relación con Morena que tajantemente ha marcado el rechazo a dicho plan de rescate urbano.
Existen antecedentes que dan lógica al planteamiento. El exdelegado en Cuauhtémoc, Alejandro Fernández, sufrió la derrota electoral que implicó la colocación de parquímetros con un amplio rechazo, y con sólo unas cuantas colonias consultadas.
Un error que Monreal conoce y capitalizó, y del cual aprendió para no cometerlo en carne propia.
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