En la política, los desencuentros son inevitables. Sin embargo, cuando las diferencias partidistas se convierten en obstáculos para el bienestar de un estado, es necesario alzar la voz. Como senador por Chihuahua, me veo en la obligación de exponer una realidad que afecta a mi tierra y que pocos se atreven a señalar.
En el Senado de la República, Chihuahua está representado por cuatro senadores: dos de mayoría de Morena, uno plurinominal también de Morena, y un servidor, de primera minoría por el Partido Acción Nacional (PAN). En un escenario ideal, más allá de nuestras diferencias políticas, deberíamos trabajar unidos para gestionar recursos y promover el desarrollo de nuestro estado. Pero la realidad es distinta.
Desde mi llegada al Senado, he defendido con firmeza las necesidades de Chihuahua, en especial en temas como agua, infraestructura y apoyo al campo. Sin embargo, estos esfuerzos han sido constantemente bloqueados por mis propios compañeros de la representación chihuahuense en Morena, cuyos intereses parecen estar más alineados con los caprichos presidenciales que con las necesidades de nuestra gente.
Un episodio reciente ilustra esta situación: ante la emergencia por sequía declarada en Chihuahua, propuse un punto de acuerdo para que el gobierno federal destinara recursos para mitigar esta crisis, complementando los mil millones de pesos ya anunciados por la gobernadora Maru Campos. La propuesta fue aprobada en comisiones y parecía avanzar. Sin embargo, la presión de la senadora de Morena por Chihuahua, apoyada por la presidencia de la Junta de Coordinación Política (JUCOPO), logró frenar el dictamen y evitar su discusión.
Este no es un caso aislado. En tribuna he enfrentado ataques verbales y hasta amenazas por parte del presidente de la JUCOPO, quien reaccionó de manera violenta cuando denuncié que su bancada había cooptado a un senador tránsfuga del PAN para obtener la mayoría. La verdad incómoda y genera reacciones airadas.
La pregunta es inevitable: ¿Por qué este desprecio hacia Chihuahua? ¿Por qué tanto esfuerzo en bloquear propuestas que sólo buscan beneficiar a nuestro estado? ¿Qué intereses se protegen al negarnos los recursos que legítimamente merecemos?
A pesar de estas resistencias, seguiré presentando propuestas, alzando la voz y defendiendo a Chihuahua. Mi compromiso es con la gente de mi estado, no con intereses partidistas ni acuerdos oscuros.
Chihuahua merece más. Y no me detendré hasta que lo obtengamos.
El autor es senador de la República y presidente de la Comisión de Desarrollo Municipal
@MarioVzqzR
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