Durante años, las autoridades locales y federales sostenían que no había cárteles en la Ciudad de México, que, en todo caso, en la capital del país sólo vivían familias de narcos, sin embargo, tal aseveración parece irse desmoronando.
Para muestra, el último suceso violento, luego del descubrimiento afuera del Reclusorio Preventivo Varonil Oriente de dos cabezas humanas fueron abandonadas, junto a una manta con un mensaje intimidatorio contra personal administrativo y de seguridad, y el subsecretario del Sistema Penitenciario, Hazael Ruiz.
Reportes policiacos indican que los restos humanos y la manta habrían sido colocados en los alrededores del penal, ubicados en la alcaldía Iztapalapa, por al menos cinco sujetos, según lo captado por las cámaras cercanas del sistema de videovigilancia C-5.
La Fiscalía General de Justicia (FGJ) de la Ciudad de México ya investiga el caso y el personal forense trabaja en la identificación de las víctimas.
Este hecho intimidatorio no es el primero que ocurre en las semanas recientes en el Sistema Penitenciario de la Ciudad de México.
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