El periodismo refleja el estado de una nación. La loable labor periodística de sembrar la más elemental duda sobre los dichos del poder es un elemento indispensable para un sistema político que se jacta de aspirar a una democracia formal.
El día de ayer, Ciro Gómez Leyva publicó la columna titulada Lo cómodo y rentable que es lloriquear desde la Condesa. Confieso que la tuve que leer varias veces. Los errores eran abundantes lo que resultaba raro viniendo de un periodista como Ciro. Sin embargo, sírvase la errática columna para señalar algunos temas que valen la pena analizar alrededor del periodismo, del activismo y de la defensa de la libertad de expresión en nuestro país.
La opinión, la crítica, la mofa y burla son bienvenidas. Ahí nada que agregar. Si para el periodista es lo mismo criticar, escudriñar, preguntar, cuestionar que lloriquear, entonces tenemos dos diccionarios distintos. Pero eso no es lo importante. Lo importante es reconocer su derecho a una opinión (sobre mi persona) y, la obligación que tiene de rectificar sus opiniones basadas en información incorrecta.
Ni se busca escandalizar ni lloriquear. No es mi caso ni tampoco supongo el de críticos como Mauricio Merino o Jesús Silva-Herzog Márquez o muchos otros que han reparado en lo insuficiente, errático y mal lograda acción presidencial de poner a su amigo a investigarlo en vez de tomar la oportunidad y cambiar el destino ejecutando acciones inequívocas de rendición de cuentas. Entonces ¿Todos lloriqueamos? O una mejor pregunta sería ¿Por qué te parece suficiente ese tímido acto presidencial? ¿En serio tan pobre es tu talante democrático que crees que criticar al presidente es lloriquear? ¿Será posible que la prensa internacional y nacional que criticó la puesta en escena esté mal? No lo creo. Para mí el verdadero escándalo es tener un presidente sumergido en un profunda crisis por conflicto de interés derivado de una mansión de 7 millones de dólares (y otras más), o un gobernador chihuahuense que se compra un banco o un secretario de hacienda que hace tratos cómodos con cuates presidenciales. Eso es escándalo. Para mí lo que tú llamas "esbozo de autocrítica" es un error y una reacción insuficiente.
Con un poco de rigor en la investigación para la columna, podrías haber acertado cuál es la página de Artículo 19. Todas las publicaciones de Artículo 19 Oficina para México y Centroamérica se encuentran albergadas en www.articulo19.org. Ese traspié tan simple llevó a aseveraciones falsas sobre la labor de la organización.
Ciro, Artículo 19 asumió la representación legal de la familia de Moisés Sánchez. Yo, personalmente, recibí tres peritajes por parte de la PGR donde se confirmaba que el cuerpo encontrado era el de Moisés. Las fotografías todavía rondan en mi mente y ha sido uno de los momentos más complicados de mi carrera profesional. Recordemos que -para que ahora sí tengas la información correcta- Moisés Sánchez, fundador del periódico La Unión, de Medellín, Veracruz, fue privado de su libertad la tarde del 2 de enero de 2014. En menos de 24 horas de su desaparición, Artículo 19 emitió la alerta en la que señalaba a Omar Bravo, alcalde de Medellín, como presunto responsable directo de la privación ilegal del periodista, según la información proporcionada por la familia. El 10 de enero, Artículo 19 manifestó su preocupación por la omisión de la FEADLE -órgano a cargo de la PGR- para atraer la investigación del caso a solicitud expresa de la familia a través de los buenos oficios de nuestra organización.
Después de dos semanas de silencio, Artículo 19 acompañó a Jorge Sánchez a realizar visitas a autoridades federales (CNDH PGR y SEGOB) y cuerpo diplomático acreditado en nuestro país, para exigir la presentación con vida de Moisés así como protección para su familia. Respecto a las agresiones contra el periódico El Mañana, de Matamoros, Tamaulipas, Artículo 19 informó sobre la privación ilegal, las agresiones físicas y las amenazas en contra de su director editorial, Enrique Juárez Torres, hechos ocurridos la tarde del 4 de febrero. En la alerta emitida, se incluyó la entrevista al director general, Hildebrando Déandar Ayala, que denunció el hostigamiento de la delincuencia organizada a raíz de su cobertura sobre la violencia que se registra en la ciudad fronteriza.
Sugerir en la columna que no atendimos hechos que tenían que ver con el Grupo Multimedios es, otra vez, falso. Del 2010 a la fecha sacamos 5 alertas que tenían que ver con ataques a instalaciones o periodistas de esa casa editorial. Échales un ojo.
Logro notar algo de exigencia sobre la supuesta no actuación de Artículo 19 en ciertos casos. Valdría hacer una pausa en el camino y preguntarte: ¿Por qué esa exigencia no se la diriges al que verdaderamente es responsable de la seguridad de los periodistas: los gobiernos? ¿Por qué no he escuchado o leído de tu parte un continuo y enérgico reclamo contra Peña ya que en su sexenio van 10 (diez) periodistas asesinados? ¿Dónde está esa punzante y sostenida crítica a Javier Duarte en cuyo sexenio 11 (once) periodistas han sido asesinados? De escándalo, ¿no crees? Hay organizaciones defensoras de derechos humanos que hacen un trabajo excepcional bajo condiciones de alto riesgo. Sería mejor reconocer y conocer estos trabajos y demandar a los gobiernos las garantías mínimas para defender derechos humanos en México incluyendo la libertad de expresión. Artículo 19 no es el responsable de la protección a periodistas en el país. Intentamos llenar un vacío estatal para brindar protección a colegas periodistas. Ni somos el gobierno ni pretendemos serlo.
Como detecto cierto desconocimiento sobre lo que ha hecho Articulo 19, permíteme brindarte alguna información que podrá ser útil: Del 2007 al 2014, Artículo 19 documentó 1,748 agresiones contra periodistas, siendo los servidores públicos quienes más agreden a la prensa. De acuerdo con la documentación elaborada por esta oficina, las entidades más peligrosas para ejercer el periodismo son Distrito Federal (264), Veracruz (202) y Oaxaca (155). Del total de agresiones documentadas durante el 2014, Article 19 emitió 43 alertas, las cuales se encuentran disponibles en la página www.articulo19.org (ojo con la página).
Desde el 2012, año en el que inició operaciones el Mecanismo de Protección a periodistas, a cargo de la Secretaría de Gobernación, Artículo 19 ha acompañado a 31 periodistas de distintas partes de México en la presentación de denuncia y seguimiento de sus casos. Hay infinidad de historias de periodistas que se rifan la vida haciendo su trabajo. Si está en tu interés defender a los periodistas, con mucho gusto te acerco información sobre casos de violaciones graves que merecen la atención de todos los periodistas del país, tan sólo del 2014, destacan:
Edwin Canché, periodista torturado el 1 de enero de 2014, por el alcalde de Seyé, Mérida; El periódico Noroeste, en Sinaloa, ha sido víctima desde hace varios años de violencia como represalia a su ejercicio periodístico. Entre los ataques sobresale el atentado contra Adrián López, director del periódico, ocurrido el 2 de abril de 2014. Días antes, policías estatales detuvieron y golpearon a periodistas de este diario que cubrían la marcha a favor de Joaquín Guzmán Loera. Desde hace 336 días, el periódico Noroeste publica en su portada la exigencia de justicia; Lydia Cacho, periodista y defensora de derechos humanos, detenida arbitrariamente y torturada en 2005, presentó en octubre de 2014, junto con Article 19, su caso al Comité de Derechos Humanos de la ONU; Pedro Canché, periodista maya, detenido injustamente (su caso fue fabricado por el MP local) desde el 30 de agosto de 2014, en Quintana Roo, pese a no tener pruebas en su contra, sigue en la cárcel esperando la resolución de un amparo interpuesto por la defensa legal de Article 19 en su favor.
Creo que mi código postal en el eje Roma-Condesa no es relevante. Pero sí es aclararte que tuve 20 días escolta de la policía federal hace dos años, y creeme que no fue una dádiva, sino que el gobierno cumplió su responsabilidad de salvaguardar mi integridad física que estaba en riesgo por mi trabajo de defensor de derechos humanos. Lo verdaderamente importante, creo, es que vivimos en un país con 82 periodistas asesinados y 18 desaparecidos, todos en impunidad. Estoy seguro y hago votos para ello que dado tu interés mostrado en la protección de los periodistas, de ahora en adelante harás los señalamientos apropiados desde tus espacios en cada uno de los casos donde se documente una agresión.
There is no ads to display, Please add some