Sea por verse obligados a salir del Partido por desacuerdos internos, presiones de otros grupos o simple ambición ante un panorama de puertas cerradas, pero son varios los militantes de Acción Nacional que abandonan las filas azules para enrolarse como candidatos de otras fuerzas políticas. Si bien, una golondrina no hace verano, la tendencia se ha incrementado notablemente en los años recientes y en las #elecciones2015 podría presentarse una sorpresa en las urnas para el blanquiazul.
Azules tránsfugas
En su historia, Acción Nacional ha tenido bajas sensibles en sus filas, desde Carlos Castillo Peraza a Vicente Fox Quesada, así como militantes que no eran muy conocidos, igual por decisión propia o por expulsión, se trata de deserciones que, en circunstancias especiales como las elecciones, pudieran afectar al Partido si continúan en la pista política con otra organización.
En particular, en el presente contexto electoral, se da el caso de varios candidatos con antecedentes panistas que tendrían la posibilidad de atraer el voto de los aún militantes que están inconformes con la actual situación interna del partido.
Muestra del cambio sufrido en el blanquiazul, para algunos para mal y para otros positivamente, estas salidas reflejan falta de mecanismos de conciliación, agotamiento de las vías para alcanzar un puesto en las listas de candidatos fuera de los grupos que controlan al Partido, o la forma en la cual inconformes demuestran su desacuerdo por la manera en que el PAN se está conduciendo en la actualidad.
Estas renuncias son, entre los más llamativas, algunas de los ex militantes que continúan sus carreras políticas en otras arenas.
Manuel Espino Barrientos a Movimiento Ciudadano (MC), después de haber apoyado a Peña Nieto en 2012, tras una trayectoria en el PAN que lo llevó a ser dirigente nacional. Por el momento, no se ha integrado a una candidatura, pero pondrá su experiencia y conocimiento del Partido que dirigió, al servicio de otros. Aunque se ha especulado una posible candidatura para ser diputado federal, ni Espino o el presidente de MC han admitido esta posibilidad.
Eugenio Govea Arcos en San Luis Potosí, exdirigente estatal y excoordinador de diputados locales en la legislatura de la entidad, es precandidato a la gubernatura por el Movimiento Ciudadano y, posiblemente, en alianza con otros partidos como el PT.
Fernando Elizondo Barragán en Nuevo León, exgobernador interino y ex secretario de energía en el sexenio foxista, buscará la gubernatura de su estado natal bajo la bandera de Movimiento Ciudadano.
Ana Rosa Payán Cervera en Yucatán, excandidata a la gubernatura, ex senadora y ex alcaldesa de Mérida, regresa en busca de la presidencia municipal de la capital del estado por Movimiento Ciudadano.
Arne Aus Den Ruthen Haag en la Ciudad de México, busca volver a ser jefe delegacional en Miguel Hidalgo bajo la figura de candidato independiente.
Patricia Durán Reveles, ex secretaria nacional de Promoción Política de la Mujer del CEN panista y ex diputada federal, siguió a Manuel Espino en su proyecto de Concertación Mexicana y, de ahí, a Movimiento Ciudadano.
Leoncio Morán Sánchez en Colima, ex alcalde de la capital de la entidad, excandidato a gobernador y ex diputado federal, busca la gubernatura bajo las siglas del Movimiento Ciudadano.
Jorge Sotomayor Chávez, diputado federal, alegando vicios en los procesos de afiliación, presentó su renuncia con la posibilidad de competir por la delegación Benito Juárez o una diputación, quizá por una alianza PVEM-PRI.
El caso más reciente, y de los más llamativos, es el de Ana Teresa Aranda Orozco, excandidata a la gubernatura de Puebla y titular del DIF y de Sedesol en el gobierno de Vicente Fox, quien estaría aceptando —de acuerdo a distintas versiones— la invitación del PVEM para ser candidata a diputada federal por el distrito 11 de la capital estatal.
Menos sonoras, han sido las renuncias de Blanca Lilia Sandoval y Enrique Barrios, diputados locales en Nuevo León; Alfonso Martínez Alcázar, diputado local y presidente del Congreso de Michoacán; Alejandro Camacho Mendoza, ex alcalde de Mazatlán, Sinaloa; María Dolores del Río Sánchez, ex alcaldesa de Hermosillo, Sonora; Víctor Manuel Sánchez Orozco, diputado local en Jalisco; y Florencio Salazar Adame, ex embajador en Colombia, entre otros.
Quizá, algunos de los nombres antes mencionados se conviertan en abanderados de otros institutos políticos, tal vez busquen nuevas opciones para sus carreras políticas, lo que es un hecho es que demuestran que el Partido ha tenido una sangría importante que no ha sido debidamente evaluada por los propios panistas.
No se trata de culpar a la dirigencia en turno, pues las condiciones para estas salidas se vienen creando desde, al menos, el 2006, pero si es de notar que en lugar de apostar por la conciliación y que la prioridad sea el Partido, se busque exterminar al adversario interno frente a todos los medios. De continuar esta tendencia, las dimisiones seguirán.
Y que de los nombres antes mencionados, varios de ellos pasen a las filas de Movimiento Ciudadano, también indica la operación de exdirigentes como Espino, por lo que se podría pensar que algo tiene entre manos para junio próximo, será cuestión de esperar.
Migajas
Abundaremos acerca del tema de la jornada electoral interna en el PAN del pasado domingo, particularmente sobre los candidatos electos, pero por los indicios, no fue una jornada exenta de detalles negativos, sobre todo en el DF, en donde siguen los problemas con el padrón, y otros detalles de interés.
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