Durante la sesión que inició el miércoles por la noche y concluyó la madrugada de este jueves en el senado de la República, el senador por el estado de Baja California, Ernesto Ruffo Appel, fijó su postura en contra de la Ley de Ingresos de la Federación para el ejercicio fiscal 2016, la cual prevé que el Gobierno Federal recaude vía impuestos y derechos 4 billones 763 mil 847 millones de pesos.
El legislador aclaró que la razón que lo llevó a votar en contra, se debe a que durante muchos años le tocó ser ejecutivo tanto de empresas privadas como del estado, situación que lo ha formado, y que le hizo darse cuenta que no se puede gastar más de lo que se ingresa de forma permanente.
“El día de hoy, he visto, he escuchado cómo se habla de parte del asunto financiero y fiscal de México: que la gasolina, que los Repecos, en fin, pero compañeros y compañeras senadores, eso es estar hablando de las ramas del árbol y no del tronco; el tronco, la parte sustantiva de lo que nos sucede hoy, es el asunto de la deuda. México está en un problema estructural de deuda, ya tenemos rato pidiendo prestado y no hay manera real o manera transparente de cómo se habrá de pagar esa deuda, sólo está creciendo”.
Aseguró también, que las finanzas públicas están perdiendo su racionalidad, pues técnicamente están quebradas, además de que aprobar la Ley de Ingresos es irresponsable.
“Ya hemos dicho que entre la deuda y las pensiones debemos el 100 % del PIB, y en crecimiento, de forma de que la carga, lo gravoso para el futuro de estas deudas es algo que no se le ve solución”.
En este contexto, el senador Ernesto Ruffo, recordó a sus compañeros la crisis financiera por la que atravesó nuestro país en los años ochenta y a peló a su calidad como ciudadanos mexicanos, antes que integrantes de partidos políticos para que razonarán la situación.
“La sobrecarga de los impuestos agobia a la economía, no se diga en mi región con el asunto del IVA y la competitividad comercial. También, vemos lamentablemente que las empresas del gobierno son ineficientes, poco competitivas y costosas de operar”.
El legislador bajacaliforniano calificó la situación como grave, porque el Ejecutivo no ha hecho ningún compromiso para remediar la situación. “Sólo se ocupan de las ramas pero no del tronco. Estamos en un asunto, en un problema de un barril sin fondo financiero”.
Finalmente, el senador lamentó que el problema sea una administración con un gasto sin control, y que pareciera que a los partidos políticos no les conviene darse por enterados o que simplemente están a la espera de que la virgencita suba el precio del petróleo.
“No queremos afrontar la realidad. Por lo pronto, yo no seré iluso, ni comparsa. Votaré en contra”.
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