Cd. de México (16 junio 2015).- Gustavo Madero sorteó anoche el escenario que afloró para el PAN con los malos resultados que obtuvo el 7 de junio, que arrojaron apenas 108 curules y un 20 por ciento de la votación nacional.
La Comisión Permanente del blanquiazul acogió sin oposición alguna el balance que el dirigente presentó a ese órgano, mayoritariamente controlado por allegados al chihuahuense.
Madero reconoció que el PAN no pudo posicionar ante la opinión pública la agenda anticorrupción, amén de que admitió que la participación en el Pacto por México terminó por afectarlos.
«Al tratar de señalar los excesos de los políticos del PRI que más irritan a los ciudadanos, recibimos más críticas que respaldo: los relojes de César Camacho, los 200 invitados de Peña a Londres y las casas lujosas de los priistas», planteó.
Si no hubo cuestionamientos al balance que presentó Madero, lo que se manifestó fue un casi unánime respaldo a una virtual candidatura de unidad de Ricardo Anaya a la presidencia del PAN.
En la tesitura que Margarita Zavala abrió después de manifestar su deseo de contender por la Presidencia de la República, Anaya fue arropado por varios liderazgos panistas, aunque la senadora Adriana Dávila estimó que se trata «no de una candidatura de unidad sino de circunstancias».
«Soy una persona libre: no tengo dueños», aclaró, entre tanto, el propio Anaya, poco antes de participar en la Comisión Permanente del blanquiazul, que ayer mismo determinó adelantar la elección interna para mediados de agosto. «Yo estaría muy honrado de poder representar a todos los militantes del PAN», dijo.
«Candidatura de unidad pero de inclusión. Llegó el momento de que sea un solo candidato, pero con la inclusión del panismo de todo el País. Es lo más sano tras esta elección del 7 de junio, pero vienen por delante 11 gubernaturas», propuso el Gobernador electo de Querétaro, Francisco Domínguez.
«Veo con muy buenos ojos a Ricardo y no tendría ningún inconveniente de apoyarlo», ofreció el guanajuatense Miguel Márquez.
Cecilia Romero, ex presidenta de Acción Nacional, hizo notar que una candidatura única de Anaya podría caer bien al panismo para evitar una nueva confrontación.
«En el PAN hemos estado acostumbrados mucho tiempo a contiendas internas y al final el que perdía la levantaba la mano al que ganaba y se acabó. Ahora, desgraciadamente, creo que el partido no está en el momento adecuado para una confrontación; en ese sentido, y sólo en ese sentido, me parece que la candidatura de Ricardo Anaya es algo favorable para el partido y para México», apuntó.
Más cauto, el presidente del partido, Gustavo Madero, advirtió que «siempre ha habido gente que se inscribe» en las internas, lo cual podría ocurrir, previó, «en los próximos días o semanas».
Anaya mismo posó con los Gobernadores electos de Querétaro y Baja California Sur, Francisco Domínguez y Carlos Mendoza Davis, quienes le alzaron la mano frente al logotipo del PAN.
«Yo quiero un partido unido, reconciliado, en eso estoy trabajando. (..) Yo quiero un PAN en el que quepamos todos, casi todos, menos los corruptos», dijo al llegar a la sede panista poco después de sostener en Puebla una comida con el Gobernador Rafael Moreno Valle y los electos de Querétaro y Baja California Sur.
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