Los miembros del Consejo de Plumas Azules de Acción Nacional, participamos a las víctimas de la tragedia de la línea doce del Metro de Ciudad de México: los heridos, sus familias y las de los fallecidos, nuestro pesar por su dolor y pérdidas de salud, o de vida y de la paz en sus familias y círculos de amistades.
Reciban nuestras sinceras condolencias, pues como seres humanos sensibles, nos conmueve esta tragedia. Rogamos al Señor por el descanso de los fallecidos y por la pronta resignación de familiares y amigos. Igualmente, le pedimos la pronta recuperación de la salud de los heridos, así como recobrar la paz interior de tantas personas afectadas por esta grave tragedia, directa e indirectamente.
Y que la justicia humana haga su trabajo, y los responsables de estos medios masivos de transporte popular, se encarguen realmente en evitar nuevas tragedias semejantes. Dios se encargará del resto.
