Exhibido por Ismael El Mayo Zambada como parte del entramado para organizar una reunión en la que fue engañado y llevado a Estados Unidos, con serias dudas acerca de su capacidad para gobernar el estado que dice gobernar –que más bien parece en manos del Cártel de Sinaloa–, con sospechas de que manipuló una bitacora de vuelo para tener una coartada con un supuesto viaje a Estados Unidos el día en que se llevaron al Mayo, con una fiscalía que mintió respecto al asesinato de Héctor Melesio Cuén y con una población temerosa de salir a las calles por la violencia desatada por la guerra entre las facciones del Mayo y los Chapitos, la pregunta que sigue sin respuesta es porque Sheinbaum sigue apoyando al gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya.
Y no hay que olvidar las acusaciones de que el narco operó a favor de Morena en las elecciones estatales del 2021, ni de los señalamientos del propio gobierno federal de que Rocha Moya sí tiene relación con el Cártel de Sinaloa.
Pero para la presidenta parece más importante seguir con la táctica lopezobradorista de negar la realidad y la posibilidad de sacar del gobierno a los malos elementos para no parecer débil ante la oposición, aunque los mexicanos padezcan a un gobernador que ha demostrado incapacidad para brindar seguridad al pueblo, pero mucha capacidad para mentir y fingir que no pasa nada.
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