15 de septiembre de 2014. Estos días de fiesta, sin duda pensamos en nuestro México. No deja de sorprenderme la capacidad que tenemos de señalar lo que está mal, es un ejercicio que hacemos con tenacidad en nuestro país. Podemos aprovechar estos días y hacer el ejercicio contrario: resaltar las cosas que nos enorgullecen de México.
No es difícil hacer una lista de las cosas que nos gustan, de los hechos históricos y sociales que nos dan motivos para enorgullecernos. La lista es interminable pero mencionaré algunas:
Somos hijos de uno de los pueblos originarios. La extraordinaria serie llamada “Discutamos México” nos permite asomarnos a nuestro país y darnos cuenta de los valores que tiene y la manera en que nos hemos desarrollado a través de un difícil proceso histórico. En uno de los capítulos, León Portilla hace notar el hecho de que venimos de uno de los pueblos originarios: los Olmecas.
Los triunfos deportivos comienzan a ser una realidad desde hace unos años. Actualmente somos potencia en clavados, claros ejemplos son Carlos Girón, Jesús Mena y Fernando Platas; ahora, millones de mexicanos hemos visto saltar a Paola Espinosa y Alejandra Orozco; nuevas generaciones en el taekwondo siguen triunfando. Hemos visto volar en salto de longitud a Luis Rivera; dos equipos que habían jugado la final de la Copa Europea contrataron a mexicanos que forman parte de la selección nacional de futbol, ahora más de diez jugadores mexicanos forman parte de equipos europeos; a Paola Longoria ya se le olvidó lo que es perder; Aída Román acaba de ganar el mundial de tiro con Arco, y la selección de basquetbol por primera vez pasó a octavos de final en la copa Mundial después de décadas de no participar y Gustavo Ayón al parecer será contratado en el un equipo español. Para el próximo año, México será sede del gran premio F1 con dos pilotos mexicanos en distintos equipos.
Puedo hablar de cómo hemos crecido en términos de infraestructura así como de servicios que se han desarrollado en la última década en salud, por ejemplo. Los ojos están puestos en México desde hace ya varios años. Hace poco Hillary Clinton se refería a México como un país exitoso y dio como ejemplos los resultados de la COPXVI en medio ambiente; el liderazgo en el G20 para llegar acuerdos económicos y el manejo de la crisis económica más dura de la época moderna. Tenemos a Mario Molina, premio Nobel de Química y cómo olvidar a Jesús León Santos, quien ganó el Premio Ambiental Goldman por su excepcional trabajo de reforestación de su región en Oaxaca.
Nuestro país tiene los mejores festivales de cine de Latinoamérica: Morelia (17 al 26 de octubre) y Guadalajara. En este año nos emocionamos con los premios otorgados a mexicanos como Alfonso Cuarón y Emmanuel Lubezki. Nuestro idioma, el castellano, nos habla desde el alma como diría Carlos Fuentes. Pero también tenemos un atlas lingüístico de 64 lenguas que nos recuerdan nuestra multiculturalidad como una riqueza que le da vida a nuestro país.
A propósito de literatura, en el marco del centenario de nuestro premio Nobel, Octavio Paz, hace unos días se inauguró la exposición “Octavio Paz y el arte” que está abierta hasta el mes de enero en el Palacio de Bellas Artes. Además, tenemos este año el centenario de otros grandes escritores como Efraín Huerta y José Revueltas.
Especialmente en este mes, nos podemos dar cuenta de que México no es de una sola tonada, ni una sola canción; la pluriculturalidad se manifiesta en lo que podemos escuchar a través de bandas, orquestas, tríos, mariachis y coros. Siempre será emocionante escuchar el “Huapango” de Moncayo o el “Danzón no. 2” de Márquez.
La lista es interminable, al menos la mía, pero lo mejor de México, es nuestra gente. Tengo muchas historias de hombres y mujeres de todas las edades que construyen a México todos los días, en el anonimato quizás, pero que hacen una comunidad viva, con un estilo propio y que se esfuerzan todos los días por vencer adversidades, por triunfar y que aman profundamente a México.
Sigamos con la lista y unámonos a ese grito que sale de lo profundo del corazón: ¡Viva México!
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