El Fondo Nacional de Desastres Naturales (Fonden), creado en 1996 para asistir en emergencias por catástrofes, fue eliminado en 2021 por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador (AMLO). El argumento principal fue que se trataba de un «nido de corrupción», con recursos malversados y procesos opacos que beneficiaban a unos pocos en detrimento de las víctimas. AMLO prometió una transformación radical, asegurando que los fondos se distribuirían directamente sin intermediarios corruptos. Sin embargo, a cuatro años de su desaparición, no se han iniciado investigaciones formales ni se han impuesto castigos a los responsables alegados. Esta omisión plantea interrogantes sobre la consistencia del discurso anticorrupción de la Cuarta Transformación (4T).
En el centro de esta controversia se encuentra José María «Chema» Tapia Franco, director del Fonden entre 2013 y 2016 durante el sexenio de Enrique Peña Nieto. Nombrado por el PRI, Tapia fue señalado por irregularidades graves. La Auditoría Superior de la Federación (ASF) detectó anomalías por más de 200 millones de pesos en el manejo de recursos, incluyendo desvíos y sobreprecios en contratos para reconstrucción post-desastres. Uno de los episodios más notorios ocurrió en septiembre de 2013, cuando huracanes azotaron México y Tapia viajó a Las Vegas, apostando en casinos y hospedándose en hoteles de lujo mientras el país enfrentaba una crisis humanitaria. Claudia Sheinbaum, en su libro «Juzguemos con evidencia», criticó explícitamente esta conducta, usándola como ejemplo de la corrupción en el Fonden.
A pesar de estos antecedentes, Tapia no enfrentó consecuencias legales. En cambio, tras renunciar al PRI en julio de 2023, migró hacia la coalición Morena-PT-Verde Ecologista. En 2024, fue postulado como candidato a la alcaldía de Querétaro por esta alianza, perdiendo por un margen de 47 mil votos ante el panista Felipe Fernando Macías. Durante la campaña, Sheinbaum lo respaldó públicamente, apareciendo en videos pidiendo el voto por él y afirmando que Querétaro estaría «en mejores manos» con Tapia. Esta alianza contradice el rechazo previo de la 4T al «PRI-AN» y sus figuras.
Aquí Sheinbaum pidiendo el voto para José María Tapia, exdirector de Fonden de Peña Nieto, en 2024. pic.twitter.com/qTOMrpNBae
— Juan Ortiz 🗳️👁🗨 (@Juan_OrtizMX) October 17, 2025
Más allá de la política, Tapia se enriqueció bajo la 4T. En 2020, su empresa recién creada obtuvo un contrato «extraurgente» con la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) por 52.6 millones de euros (alrededor de 1,350 millones de pesos) para suministrar 1,330 ventiladores contra el COVID-19, en medio de acusaciones de sobreprecios. Reportes periodísticos estiman su fortuna en más de 260 millones de pesos, incluyendo propiedades en México y Estados Unidos, como un departamento de 12 millones de dólares en Houston. Su esposa también se benefició de contratos millonarios para equipo médico durante la pandemia.
Recientemente, ante críticas renovadas por inundaciones en estados como Veracruz, la presidenta nacional de Morena, Luisa María Alcalde, se deslindó de Tapia el 17 de octubre de 2025, afirmando que no es militante del partido sino del Verde Ecologista, y anunciando una comisión para revisar perfiles de aspirantes. No obstante, su candidatura en 2024 y el apoyo de Sheinbaum evidencian una integración efectiva en la 4T, cuestionando la selectividad en la lucha contra la corrupción.
🗳️📌 Luisa Alcalde anuncia que el exdirector del Fonden de Peña Nieto no forma parte de Morena.
(Nomás lo hicieron candidato en 2024) pic.twitter.com/ARm6HibZke
— Juan Ortiz 🗳️👁🗨 (@Juan_OrtizMX) October 17, 2025
Este caso ilustra un patrón en la política mexicana: la retórica anticorrupción choca con pragmáticas alianzas. Mientras víctimas de desastres claman por transparencia, figuras como Tapia prosperan sin rendir cuentas, erosionando la credibilidad de Morena. La ausencia de investigaciones sugiere que el Fonden no fue solo un fondo fallido, sino un símbolo de impunidad persistente. En un contexto de crecientes desastres climáticos, urge una auditoría exhaustiva para restaurar la confianza pública.