Luego que el presidente Andrés Manuel López Obrador descalificó el trabajo periodístico de Carmen Aristegui, durante su conferencia matutina en el estado de Tlaxcala, la periodista también denunció la situación de riesgo en la que el presidente ha puesto a los periodistas, al señalarlos desde la tribuna presidencial.
El mandatario aseguró que su antes aliada, ahora estaba a favor del bloque opositor y que actualmente el medio está en contra de su administración, con otros como abiertamente opositores al Gobierno Federal como Reforma y El Universal.
López Obrador se molestó con la periodista porque se atrevió a comparar las casas donde ha habitado su hijo mayor, José Ramón López Beltrán desde 2019 con el escándalo de la “Casa Blanca” donde la misma Aristegui denunció un escándalo de corrupción que afectaba directamente al entonces presidente Enrique Peña Nieto y su esposa Angélica Rivera:
“A la hora de las definiciones se fue, o así pensaba siempre, pero simulaba, está a favor del bloque conservador. Todos estos estos reportajes calumniosos, manejados por Carmen Aristegui”’, dijo López Obrador el viernes.
También criticó que Aristegui le diera espacio al consejero presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova.
“Engañó durante mucho tiempo porque la gente la ve como el modelo de comunicación a seguir, la paladina de la libertad”. Pero advirtió que se debe tener cuidado con su trabajo porque ““era muy venerada (…) y no, no, no, a la hora de las definiciones, se fue o así pensaba siempre, pero simulaba. Hoy está a favor del bloque conservador”, aseguro.
“Van enseñando el cobre. Decía el presidente Lincoln que al pueblo se le puede engañar una vez, dos veces, pero no toda la vida”, y mencionó que Aristegui ha publicado “reportajes calumniosos”
“Lamentable que el presidente use recursos públicos para agredir”
La periodista indico que: “es lamentable que el presidente use su poder para destruir reputaciones. En lo que a mi corresponde, yo hago mi trabajo, soy una periodista de muchos años, el público dirá lo que tenga que decir de mi trayectoria”, aseguró y recordó la importancia del periodismo en una sociedad democrática.
“La crítica es un ingrediente básico en las democracias (…) el ejercicio del poder requiere miradas críticas y requiere ejercicios que no resultan simpáticos al poder, eso es parte de la naturaleza democrática (…) los periodistas juegan un papel importante”, argumentó.
“No parece percatarse que detenta un poder enorme y que sus agresiones, porque eso son, y sus dichos que pretenden denostar la trayectoria, la credibilidad, el prestigio periodístico, los elementos que son fundamentales para ser periodista. Al final de cuentas, los periodistas tenemos como principalísimo activo, la credibilidad lo que la gente, y lo que las personas amablemente siguen nuestros programas y nuestra tarea periodística, tengan relación a nuestro ejercicio”, dijo.
“No puedo considerar de otra manera el asunto más que como una agresión directamente del presidente de la República a mi persona y me queda clarísimo cada vez más que el presidente dice cosas que tienen un solo propósito: dañar lo que es más importante para una periodista, dañar la reputación, dañar la trayectoria periodística, dañar la credibilidad y eso es un asunto que tenemos que tomar conciencia de los que significa”, expresó.
Y agregó: “El presidente de la República hace uso del poder político que tiene, y de su mandato, para ocupar tiempo y recursos para agredir de esta manera (…) Es lamentable, por los cuatro costados, que se quiera utilizar la palabra tan poderosa del presidente de la República para destruir reputaciones, para destruir lo que a final de cuentas está ahí a la vista de cada quien”.
“Al final tenemos que subrayar que el presidente de México está decidido a dañar a esta periodista en la forma en que lo hace porque no hay nada más grave que se digan cosas, como las que dice el presidente, de esta manera tan rotunda (…) me acusa hasta de engañar a la gente y hasta de cosas absolutamente absurdas. Ya que cada quien analice quién engaña a quién y cada quién que se haga cargo de su biografía y ya veremos en qué termina toda esta historia”, expresó.
Carmen Aristegui señaló que el país vive un “tránsito difícil” en el trabajo de los periodistas, que tiene gran importancia para las democracias, aunque resulte “odioso, antipático o incómodo”.
“No se trata de decir ‘no hablen de los periodistas’, somos, cualquiera, sujetos de crítica, sujetos de escrutinio, todo lo que hacemos y decimos, naturalmente está bajo la lupa de las personas que amablemente siguen nuestros programas”, dijo.
“La crítica es un ingrediente básico en las democracias (…) el ejercicio del poder requiere miradas críticas y requiere ejercicios que no resultan simpáticos al poder, eso es parte de la naturaleza democrática (…) los periodistas juegan un papel importante”, declaró la periodista.
Mientras que en el caso de Lorenzo Córdova, Aristegui reconoció que como el consejero presidente del INE tiene una de “las voces más lúcidas del análisis político-electoral en México. Pero como traen una guerra contra el INE y lo quieren igualmente desacreditar, quieren que haya un naufragio en esa importantísima institución, pues el presidente ya agarró vuelo para desacreditar a todo el que se le pare enfrente y es un fenómeno que no podemos pasar por alto”.
“Es grave, es delicado que el presidente con toda naturalidad esté en este proceso, en contra de sus críticos o de quien él ya ha bautizado como bloque opositor o conservador”, lamentó.
Por ello, aseguró que no promoverá la participación de la ciudadanía en la consulta para impulsar la revocación de mandato.
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