¡Vaya que el culebrón político no descansa, amigos! Hoy, en esta esquina del chisme político, traemos un trascendido que está dando de qué hablar en los callejones digitales de X: el ministro de la Suprema Corte, Alberto Pérez Dayán, estaría a punto de colgar la toga para enfundarse en el traje de cónsul en Barcelona. Sí, así como lo oyen, el hombre que dio el voto decisivo para que la polémica reforma judicial de la 4T siguiera en pie, ahora podría estar recibiendo su recompensa en forma de un billetazo diplomático. Pero, ojo, esto es puro rumor, de esos que corren como pólvora en las redes y que, aunque no están confirmados, tienen a más de uno con la ceja levantada.
Todo comenzó con el voto de Pérez Dayán el pasado 5 de noviembre de 2024, cuando rompió el bloque de ocho ministros que parecían listos para tumbar la elección popular de jueces. Según posts en X, como el de @dariocelise, el ministro “no alcanzó” para embajador en España, pero se habría conformado con el Consulado en Barcelona, un puesto que, según @AGutierrezCanet, no requiere ratificación del Senado, evitando así un escándalo político. ¡Vaya jugada! Los tuiteros no han parado de llamarlo “traidor” (@Mimi_Mx01) o de ironizar sobre cómo la 4T “paga a los que se doblan” con “vino, playa y fuero diplomático” (@miguel_dogo). Hasta @ferbelaunzaran soltó que esto es una “obscenidad” de Morena, premiando a quienes allanan el camino a sus reformas.
El chisme no termina ahí. Hay quienes dicen que Pérez Dayán, conocido por su trayectoria intachable y su doctorado en Derecho por la UNAM, dio un giro de 180 grados tras reunirse con la mismísima Claudia Sheinbaum y Adán Augusto López, según un reportaje de El País. ¿Presiones? ¿Negociaciones? Nadie lo confirma, pero en X la gente ya lo bautizó como el “ministro que se dobló” (@jenroma27). Y no es para menos: antes era el villano de Morena por tumbar la Ley de la Industria Eléctrica de AMLO, y ahora, de repente, es el héroe de la 4T, celebrado por Noroña con un “¡larga vida a Pérez Dayán!”. ¿Coincidencia? Los usuarios de redes no lo creen.
Lo que sí está claro es que el rumor de su salto al consulado ha desatado un torbellino de especulaciones. ¿Es esta la nueva moneda de cambio de la 4T? Porque no es la primera vez que vemos a exgobernadores priistas o perredistas aterrizar en embajadas tras “portarse bien”. Mientras tanto, en los pasillos de la Suprema Corte, el ambiente está que arde, y en X, la porra no para de gritar “¡traidor!”. ¿Será verdad que Pérez Dayán cambiará los estrados por las Ramblas? Solo el tiempo lo dirá, pero el chisme está que quema.
There is no ads to display, Please add some
