¡Vaya show el que se armó en Palacio Nacional! En una de esas mañaneras que ya son puro circo, la liberación de Israel Vallarta, acusado de secuestro y presunto líder de la banda “Los Zodiaco”, fue celebrada como si fuera la llegada del Mesías. Sí, así como lo oyen, en el corazón de la 4T se pusieron a aplaudir la salida de un tipo que estuvo casi 20 años en el bote sin sentencia, pero con señalamientos de seis víctimas que no se borran con un plumazo judicial. Y no solo eso, en redes sociales, los propagandistas de Morena, esos que no sueltan el teclado ni para ir por el café, ya andaban candidateando a Vallarta para una senaduría en 2030. ¡Órale! ¿Qué sigue? ¿Un narco-presi en 2036?
El chisme en X está que arde. Usuarios como @hromol73 soltaron que la liberación de Vallarta fue puro teatro para tapar otros escándalos, como el lavado de dinero de Alfonso Romo o que Adán Augusto sea el capo de “La Barredora”. Otros, como @malusita76, no se anduvieron con rodeos y gritaron que Vallarta es un criminal identificado por víctimas, y que Morena solo quiere distraer porque, según ellos, “es un nido de narcos y ratas”. Fuerte, ¿no? Hasta @vampipe se lanzó diciendo que una jueza “morenista” sacó a Vallarta por órdenes políticas. Claro, todo esto son rumores, trascendidos, y el clásico “me dijo un pajarito” que corre en las redes, así que no se lo tomen tan a pecho.
Pero la cosa se pone más sabrosa. Mientras en Palacio Nacional brindaban por la “justicia” para Vallarta, llegó el fiscal Alejandro Gertz Manero como aguafiestas a recordar que el señor todavía tiene juicios pendientes. ¡Zas! Según los murmullos en X, Gertz prácticamente puso el freno de mano al festejo, señalando que hay víctimas de secuestro que siguen sin justicia. @MLopezSanMartin lo dijo claro: “Se escuchan muchas voces… menos la de las víctimas”. Y es que, aunque el montaje televisivo de García Luna en 2005 fue una aberración, hay quienes, como @MaElenaMorera, insisten en que Vallarta no es ningún angelito, pues seis personas lo señalan como su secuestrador.
Entonces, ¿qué tenemos? Un gobierno que celebra la liberación de un acusado sin sentencia, pero con señalamientos graves, y una fanaticada en redes que ya lo ve de senador. Mientras, las víctimas de secuestro, esas que nadie menciona en las mañaneras, siguen esperando que alguien les haga caso. ¿Será que en la 4T prefieren los titulares rimbombantes a la justicia real? En fin, esto es puro chisme de redes, pero como decía mi abuelita, “cuando el río suena, agua lleva”. Ojalá no sea agua turbia.
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