El panorama laboral en México durante 2025 presenta un contraste de cifras. Si bien el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) registró una cifra récord de trabajadores afiliados en junio, con un total de 22,325,666 puestos de trabajo, el empleo formal experimentó una notable desaceleración en la primera mitad del año, generando preocupación en el sector productivo. Esta dualidad define un escenario complejo que demanda atención por parte de las autoridades y actores económicos.
A cierre de junio de 2025, el IMSS alcanzó su nivel más alto de afiliados para dicho mes, consolidando un crecimiento anual del salario base de cotización del 7.5%, uno de los más elevados en los últimos 23 años. Además, el número de patrones afiliados ascendió a 1,041,636, aunque con una variación anual negativa. Sin embargo, la noticia agridulce es la pérdida neta de 139,444 empleos formales en el segundo trimestre de 2025 (abril, mayo y junio), lo que ha llevado el semáforo de generación de puestos de trabajo a mantenerse en rojo por tres meses consecutivos.
En el primer semestre de 2025, México sumó únicamente 87,287 puestos de trabajo formales, una cifra significativamente menor a la meta de 100 mil empleos mensuales y una drástica caída de más de 200 mil puestos en comparación con el mismo periodo del año anterior. Esta desaceleración, según analistas, se explica por un «clima conservador en el sector privado», influenciado por la incertidumbre global y nacional, proyectando 2025 como uno de los años con menor creación de empleo formal en más de dos décadas.
A nivel regional, la Ciudad de México concentra la mayor cantidad de afiliados al IMSS, con más de 3.4 millones, seguida por Jalisco y Nuevo León. Sin embargo, entidades como Tabasco, Campeche, Oaxaca, Ciudad de México, Chiapas y Zacatecas han registrado pérdidas de puestos de trabajo en la primera mitad del año. La brecha de género también persiste, con una menor proporción de mujeres en puestos formales en comparación con los hombres, especialmente en Tabasco.
En cuanto a la informalidad, aunque hubo una ligera baja en el primer trimestre de 2025, el 54.3% de los trabajadores mexicanos aún se desempeñaba en un empleo informal. El salario sigue siendo el principal motivo de insatisfacción laboral, pero factores como la falta de oportunidades de crecimiento, el mal liderazgo y la escasez de reconocimiento también impulsan la alta rotación.
El mercado laboral mexicano se enfrenta a retos importantes, incluyendo la necesidad de generar empleos de mayor calidad y adaptarse a tendencias como la flexibilidad laboral, la inteligencia artificial y la automatización, que ya están impulsando la creación de nuevas profesiones y la demanda de habilidades específicas. Es crucial que las empresas inviertan en capacitación y bienestar para retener el talento y fomentar un entorno laboral más equilibrado.



























