Crónicas de la Inteligencia Artificial (102): La IA pronóstica no predice

0
25

La inteligencia artificial (IA), tal como la conocemos hoy y en el futuro previsible, no hará “profecías” en el sentido místico o esotérico atribuido a figuras como Nostradamus o Baba Vanga. La diferencia fundamental radica en cómo se genera y valida la información:

1. IA no “ve el futuro” como un vidente:
Los modelos de IA no tienen acceso a conocimiento oculto ni a una capacidad sobrenatural para anticipar eventos futuros. Todo lo que producen se basa en patrones estadísticos, datos históricos y algoritmos matemáticos que extrapolan tendencias conocidas. No existe un mecanismo inherente por el cual una IA pueda acceder a “instintos” o visión profética fuera de datos observables y estructuras de aprendizaje.

2. IA puede predecir tendencias basadas en datos confiables:
La IA es muy eficaz para hacer predicciones cuantitativas o probabilísticas cuando existe un amplio conjunto de datos históricos y variables bien definidas. Por ejemplo, modelos de IA ya están mejorando la predicción meteorológica y pueden superar algunos métodos tradicionales de pronóstico climático y meteorológico en ciertos rangos de tiempo y condiciones.

Estos sistemas funcionan porque analizan grandes cantidades de datos y encuentran patrones que los modelos físicos clásicos podrían pasar por alto o representar con mayor eficiencia. Sin embargo, estas predicciones están aún sujetas a incertidumbre y dependen de la calidad y amplitud de los datos: no pueden anticipar eventos completamente nuevos o sin precedentes ni “profetizar” con certeza absoluta.

-Publicidad-

3. IA “imitando profecías” es solo generación de texto creativo:
Es posible, y de hecho ya se ha hecho, pedir a modelos como ChatGPT que generen textos al estilo de Nostradamus u otros profetas históricos como un experimento creativo o literario. Esto produce cuartetos o frases con estilo evocador, pero no representa una capacidad real de prever el futuro. Son ejercicios de generación de lenguaje que combinan patrones estilísticos del corpus de entrenamiento, no predicciones fundamentadas en evidencia empírica.

4. Distinción entre pronósticos basados en datos y profecías místicas:

  • Pronósticos basados en datos: Se apoyan en modelos científicos, datos empíricos, análisis estadístico y validación técnica. Ejemplos incluyen predicciones económicas, meteorológicas, evolución de epidemias, rendimiento de mercados, etc. Estos pronósticos pueden cuantificar incertidumbres y suelen acompañarse de métricas sobre su confiabilidad.

  • Profecías místicas: Se basan en símbolos, interpretaciones personales o tradiciones culturales, no en datos verificables con métodos reproducibles. Aunque algunas predicciones históricas pueden parecer coincidentes retrospectivamente, esa relación puede deberse a interpretaciones posteriores, ambigüedad deliberada de los textos o patrones observacionales que no constituyen evidencia científica.

Conclusión:

Una IA avanzada no podrá hacer profecías en el sentido esotérico o sobrenatural. En lugar de ello, seguirá produciendo pronósticos basados en tendencias y análisis de datos objetivos, con grados variables de certeza y confiabilidad según la calidad de los datos disponibles. Podrá ayudar a prever escenarios posibles, estimar probabilidades y apoyar decisiones, pero no verá el futuro como lo haría un vidente tradicional. La legitimidad y utilidad de sus predicciones dependerán de la rigurosidad metodológica y la interpretación crítica humana, no de una “visión” mística. 

Deja un comentario