Leyes Esposa: Paridad o Nepotismo Disfrazado

0
38

¡Ay, nanita! Claudia Sheinbaum anda bien enojada con eso del nepotismo, pero ahora le toca lidiar con los gobernadores que se las ingenian para pasar el poder como si fuera el control remoto de la tele: directo a la esposa.

Primero impulsó la ley antinepotismo que puso a media Morena de cabeza, porque varios querían heredar el puesto a primos, hermanos o cuñados. Al final, la aprobaron pero pateada hasta 2030, para que no les doliera tanto en 2027. Sheinbaum dijo que Morena no pondría familiares de todos modos, pero ya veremos.

Y ahora, ¡zas!, en San Luis Potosí aprueban la «Ley Ruth» –porque así le dicen, en honor a Ruth González, la señora del gobernador Ricardo Gallardo– que obliga a que en 2027 solo mujeres puedan candidatearse a la gubernatura. ¡Qué casualidad! Justo para que la esposa del Pollo Gallardo pueda sucederlo sin broncas. Gallardo dice que es por paridad y para cumplir con la Corte, pero huele a traje a la medida desde aquí hasta Palacio Nacional.

Lo mismo pasa en Nuevo León con la «Ley Mariana», para que Mariana Rodríguez, la influencer esposa de Samuel García, tenga el camino pavimentado rumbo a 2027. Samuel jura que no, que su Mariana está feliz con las niñas y la familia, pero las reformas locales gritan otra cosa.

-Publicidad-

Sheinbaum, con toda la razón del mundo, salió a decir que está a favor de la paridad –mitad hombres, mitad mujeres, como debe ser–, pero no de forzar que en un año específico solo vayan mujeres si es para colar a la doña de turno. Ya mandó a Arturo Zaldívar a checar si esas leyes estatales son constitucionales o puro truco para dinastías familiares.

Al final del día, la presidenta tiene razón: la paridad es para que más mujeres lleguen al poder de verdad, no para que los gobernadores hagan changuitos y pasen la estafeta al amor de su vida. Porque si no, ¿dónde queda el mérito? ¿Y la gente qué, se chupa el dedo? Estos trucos nomás reviven el viejo priismo de «el que sigue es mi familiar». Claudia, sigue firme, que el pueblo ya no se deja tan fácil.

Deja un comentario