¡Qué tal, carnales! Aquí en Off the Record, donde soltamos los chismes que corren como pólvora en las redes, pero ojo: todo esto son versiones no confirmadas, purititos rumores y comentarios de usuarios que andan echando bronca en Twitter (o X, como quieran llamarlo). Nada oficial, eh, solo el pulso de la calle digital, donde la gente no se calla ni con cinta adhesiva. Hoy, el tema que nos trae con el alma en un hilo: el alcalde de Tepoztlán, Perseo Quiroz Rendón, soltó la bomba de que le llovieron amenazas del crimen organizado. Y no es la primera, porque justo después del balazo que se llevó Carlos Manzo en Uruapan, parece que los narcos andan con la mira calibrada en los ediles que se la juegan por sus pueblos.
Empecemos por Perseo. Según un tuit de @NoticiasTepoz ayer mismo, el cuate denunció llamadas de supuestos sicarios, y la Fiscalía de Alto Impacto ya metió las narices. Pero en los comentarios, la cosa se pone jugosa. Un usuario, @RedMorelos_N, soltó que fueron dos amenazas en once meses, una salida de un penal pidiendo «cuotas» como si fuera el club de fans del diablo. «¿Y ahora qué, Perseo? ¿Vas a pedir guardaespaldas o nomás cruzas los dedos?», escribió un neta enojado bajo ese post. Otro, anónimo en la sección de replies, andaba sospechando: «Esto huele a que el crimen ya controla hasta los reclusorios. ¿Quién filtró el número del alcalde? Alguien de adentro anda vendido». Rumores, puro cotilleo de teclado, pero con 39 vistas en horas, la gente ya lo comparte como pan caliente. Y no miento, en Tepoztlán, que es puro hippie y pirámides, nadie esperaba que el alcalde zen terminara negociando con el diablo. ¿Será que rechazó pagar piso por alguna obra en el zócalo? Suposiciones, carnal, pero en redes circulan capturas de WhatsApps supuestamente «filtrados» donde un contacto dice: «Si no afloja, le pasa lo de Uruapan». ¿Verdad o fake? Ni idea, pero el miedo se palpa.
Y hablando de Uruapan, ¡uf! El asesinato de Carlos Manzo sigue ardiendo como chile en nogada. Posts de @infobaemexico y @Radio_Formula hablan de marchas con 70 mil almas pidiendo justicia, vestidos de blanco como fantasmas vengadores. Un comentario de @kachoman1 me mató: «Morena desvía la atención con marchas del 15, pero el tiro a Manzo no se borra. ¿Fue por jalarle al CJNG o a Los Viagras? Claudia victimizándose, qué patético». Otro usuario, @moshzm, lo clavó: «Es como si Sheinbaum dijera que ella es la víctima del crimen, igualito que este wey con el 11-S». Y en el hilo de @GrupoMix, con video de la marcha, replies como «El gobierno lo mató por no dejarse» suman miles de likes. Fuentes no oficiales en X juran que Manzo había pedido ayuda federal semanas antes, pero le cayeron con un menor de 17 años como sicario –según El País–, pagado con 50 mil varos, dice un rumor de YouTube. ¿Colusión? Un tuit de @Escaparatista57 lo pinta negro: «Sheinbaum solo exige perdones mientras alcaldes piden auxilio y les dan la espalda». En Puebla, hasta alcaldes de Huixcolotla y Eloxochitlán andan temblando, con posts de @JornadaOriente confirmando amenazas y policías renunciados.
Esto pinta un México donde los alcaldes son como patos en feria: expuestos, solos y a merced de capos que mandan más que el mismísimo presidente. Rumores en X hablan de una «lista negra» circulando por Telegram, con nombres de ediles que no pagan cuota. ¿Perseo el siguiente? ¿O ya hay uno en Jalisco rumiando lo mismo? La neta, carnales, da coraje leer estos comentarios: familias aterrorizadas, pueblos en vilo. Pero hey, al menos en redes no nos callamos. Si esto es la «transformación», ¿dónde carajos está el escudo para estos héroes locales? Suposiciones mías, claro, pero el eco en Twitter dice que el crimen no solo mata, sino que gobierna desde la sombra.



























