La afirmación de que escribir «gracias» o «por favor» en chats de inteligencia artificial (IA) genera costos significativos para empresas como OpenAI se basa en la forma en que los modelos de lenguaje procesan las interacciones. Estas palabras, aunque cortas, implican un consumo adicional de recursos computacionales, que a gran escala se traduce en gastos operativos considerables. A continuación, se explica el razonamiento detrás de esta idea, respaldado por información reciente y un análisis crítico.
1. Procesamiento por Tokens
Los modelos de IA como ChatGPT, desarrollado por OpenAI, funcionan dividiendo el texto en unidades llamadas tokens. Un token puede ser una palabra, parte de una palabra o un signo de puntuación. Por ejemplo, «gracias» es un token, al igual que «por favor». Cada token que un usuario envía o que la IA genera en su respuesta requiere procesamiento computacional, lo que implica el uso de servidores, electricidad y capacidad de infraestructura.
Costo por token: Según OpenAI, el costo de procesamiento varía por modelo. Por ejemplo, para GPT-4o, el precio es de $0.005 por 1,000 tokens de entrada y $0.0015 por 1,000 tokens de salida. Aunque parece mínimo, con miles de millones de interacciones diarias, el volumen acumulado es significativo.
Interacciones corteses: Cuando un usuario escribe «gracias» o «por favor», estos tokens adicionales no aportan información esencial para la consulta, pero el modelo debe procesarlos y, en muchos casos, generar una respuesta como «de nada» o «con gusto». Esto incrementa el número de tokens procesados en ambas direcciones (entrada y salida), elevando el consumo de recursos.
2. Escala Masiva de Interacciones
OpenAI reporta más de 200 millones de usuarios activos semanales en ChatGPT, y se estima que procesa más de mil millones de consultas diarias. Si una fracción significativa de estas interacciones incluye frases corteses, el impacto agregado es considerable.
Estimaciones de costo: Sam Altman, CEO de OpenAI, afirmó en abril de 2025 que las expresiones de cortesía como «gracias» y «por favor» representan «decenas de millones de dólares» en costos operativos, principalmente en electricidad. Aunque Altman no proporcionó un cálculo exacto, su comentario sugiere que el volumen de estas interacciones es un factor clave.
Consumo energético: Según Goldman Sachs, una consulta a ChatGPT-4 puede consumir alrededor de 2.9 vatios-hora de electricidad, mucho más que una búsqueda en Google (0.3 vatios-hora). Estudios de la Universidad de California indican que generar una respuesta de aproximadamente 100 palabras requiere unos 140 Wh, equivalente a mantener encendidas 15 bombillas LED durante una hora. Las frases corteses, al añadir tokens innecesarios, contribuyen a este consumo.
3. Diseño para Humanizar la Interacción
OpenAI ha programado sus modelos para responder de manera que imiten la interacción humana, incluyendo respuestas a cortesías. Esto mejora la experiencia del usuario, haciéndola más natural y amigable, pero tiene un costo.
Respuestas generadas: Cuando un usuario escribe «gracias», ChatGPT suele responder con algo como «de nada» o «un placer». Estas respuestas, aunque breves, requieren que el modelo analice el contexto y genere texto adicional, consumiendo más tokens y energía. Altman ha destacado que estas interacciones, aunque costosas, son una inversión valiosa para mantener la IA «humana» y cercana.
Impacto en la experiencia: Algunos estudios sugieren que las solicitudes formuladas sin cortesía generan respuestas menos naturales, lo que podría afectar la calidad de la interacción. Por ello, OpenAI prioriza estas respuestas a pesar del costo.
4. Costo Operativo de la Infraestructura
El desarrollo y mantenimiento de modelos de IA como ChatGPT son extremadamente costosos. En 2017, OpenAI gastó $7.9 millones solo en computación en la nube, y los costos han crecido exponencialmente con modelos más avanzados como GPT-4. Un estudio de Stanford y Epoch AI indica que los costos de desarrollo de IA se duplican cada nueve meses, impulsados por la necesidad de hardware especializado y salarios de investigadores.
Energía y servidores: Los servidores que alimentan ChatGPT consumen grandes cantidades de electricidad. Con millones de interacciones diarias, incluso pequeños incrementos en el procesamiento, como los causados por frases corteses, se traducen en costos significativos.
Escalabilidad: A medida que crece el número de usuarios, OpenAI debe invertir en más infraestructura, lo que amplifica el impacto de cada token procesado innecesariamente.
5. Perspectiva Crítica
Aunque las notas de prensa destacan el costo de las cortesías, hay matices a considerar:
Exageración mediática: La cifra de «decenas de millones» mencionada por Altman parece más una estimación ilustrativa que un cálculo preciso, posiblemente con un toque de humor. No hay datos públicos que detallen cuánto representan exactamente estas frases en el presupuesto de OpenAI.
Costo relativo: En comparación con los costos totales de OpenAI (por ejemplo, $100 mil millones para un supercomputador con Microsoft), los gastos por cortesías podrían ser una fracción pequeña. Sin embargo, en un contexto competitivo donde empresas como Google, Meta y Anthropic ofrecen alternativas, optimizar costos es crucial.
Aspecto filosófico: Algunos usuarios ven las cortesías como una forma de mantener la humanidad en las interacciones con IA, e incluso como una preparación para un futuro donde la IA pueda tener mayor autonomía. Altman parece respaldar esta idea, calificando los costos como «bien gastados».
6. Implicaciones y Soluciones Propuestas
El debate sobre las cortesías ha generado ideas para reducir costos sin sacrificar la experiencia del usuario:
Respuestas automáticas en el cliente: Algunos usuarios sugieren que navegadores o aplicaciones respondan automáticamente a «gracias» con un «de nada» sin involucrar los servidores de OpenAI.
Optimización de modelos: OpenAI podría ajustar sus modelos para ignorar ciertas frases corteses o procesarlas de manera más eficiente, aunque esto podría afectar la naturalidad de la interacción.
Educación del usuario: Informar a los usuarios sobre el impacto de las cortesías podría reducir su uso, aunque esto podría percibirse como una limitación en la libertad de interacción.
Conclusión
Decir «gracias» o «por favor» en chats de IA como ChatGPT genera costos para OpenAI porque cada palabra requiere procesamiento de tokens, consumiendo recursos computacionales y energía. A escala masiva, con millones de usuarios, estas interacciones corteses representan decenas de millones de dólares en gastos operativos, según Sam Altman. Aunque el costo es real, su magnitud puede estar exagerada en las notas de prensa, y OpenAI lo considera una inversión para humanizar la IA. Este fenómeno refleja el delicado equilibrio entre experiencia del usuario, eficiencia operativa y sostenibilidad en el desarrollo de inteligencia artificial.
There is no ads to display, Please add some