¿Rescatar a México?

0
2159

*Caras Nuevas, Viejas Luchas

En el ocaso de la administración del presidente Felipe Calderón comenzó la evaluación de su mandato: un sexenio cuya característica fue la lucha contra la delincuencia organizada, sobrio, protocolario y de mano dura, responsable en el manejo de las finanzas públicas, se manejó con prudencia dejando una economía estable.

No obstante lo anterior, fue duramente criticado por los adversarios políticos, al considerar insuficientes los logros obtenidos, particularmente en el área de la seguridad, donde se fincaron severas críticas a su mandato, abriendo expectativas a favor de un renovado priísmo, con un discurso y campaña mediática que despertaba la atención de los electores.

-Publicidad-

Los resultados sobre la administración de Peña Nieto se constriñen a una verdadera debacle, se extrañan los gobiernos de Fox y Calderón, pues prácticamente en todos los rubros se percibe un gran deterioro, particularmente en el esquema de la corrupción y la impunidad, dando manga ancha para que muchos funcionarios de alto nivel incluyendo a gobernadores de su partido cometan excesos sin precedentes en la materia, provocando gran desilusión y profunda desconfianza.

Algunos teníamos la expectativa de que se daría un golpe de timón a efecto de recuperar el rumbo.

Sin embargo, eso no ha ocurrido y para como se ven las cosas, se considera difícil provengan decisiones del ejecutivo en la dirección adecuada, en consecuencia, ahora se centra la atención en las campañas electorales intermedias, en tanto que resulta ser el único reducto para paliar el temporal, con el ánimo de cuando menos ubicar en el Congreso una barrera de contención.

El dilema vuelve a presentarse al igual que en las elecciones del 2012.

Cuando se decía sobre el regreso del viejo PRI, en realidad fue un engaño hablar sobre su renovación, siguen siendo los mismos propósitos: perpetuarse en el poder a costa de lo que sea.

Hemos pasado por muchas situaciones críticas, pero ninguna como la actual, razón por la cual llama poderosamente la atención la descomposición social, económica, política y cultural por la que atravesamos.

Pese a las condiciones de apatía, se abren ventanas de oportunidad para el efecto de contrarrestar los efectos negativos y desesperanzadores de un futuro incierto y poco prometedor.

Curiosamente los jóvenes, que en su mayoría estaban apáticos, al ver los vaivenes de la incertidumbre, sintieron en riesgo su porvenir y han comenzado a participar. Las nuevas generaciones con el acceso a un mundo de información y, con ganas de forjar mejores condiciones de vida, han decidido rescatar a México, esa es la parte positiva que encuentro en estos momentos cruciales.

Caras nuevas, viejas luchas.


There is no ads to display, Please add some

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí